Las tardes de El Chivo, aunque no tengan mucha nieve, siempre son espectaculares. Esta vez subimos a dar un pequeño paseo y respirar el aire puro de esta montaña. Jugar con la nieve, correr y disfrutar del calor de la tarde, ya al final del día.
Además ver los picos nevados da una sensación de tranquilidad especial.
Track de la ruta